Desde el año 2011 hemos sido testigos de una ola de movilizaciones sociales en diversos lugares del planeta. Esta explosión movilizadora se acrecentó de la mano de una movilización global feminista, dentro de la que destaca el fenómeno #MeToo, que sirvió de inspiración para la propagación del cuestionamiento dentro de los movimientos políticos más importantes del último tiempo.

En Chile, hacia mayo de 2018 explotó lo que para varias estudiosas de los movimientos sociales y el feminismo se consideran “el mayo feminista”. Mujeres estudiantes de todo el país se movilizaron visibilizando la violencia de género en las universidades, así como también dentro del movimiento estudiantil y sus repertorios de acción. Este hecho desbordó a las universidades, transformándose en un cuestionamiento transversal de parte de las mujeres hacia

La revuelta del octubre del año 2019 que provocó un hiato que se encontraba fracturado entre la población y la política, tuvo un brazo feminista. Mujeres de todo Chile se indignaron provocadas por la performance del colectivo artístico “las tesis” un violador en tu camino.

Las hipótesis de la investigación son:

• Las mujeres aparecen como una demanda democrática interna dentro del movimiento estudiantil.
• La presión de las mujeres produce un cambio en los marcos de sentido y en los repertorios de acción, con ello una re-invención del movimiento social, que se re-define a partir de ese momento como feminista.
• El feminismo es utilizado como herramienta de politización dentro del Movimiento Estudiantil.
• Partidos políticos y movimientos sociales se feministizaron y expanden una crítica a la cultura chilena a partir del mayo feminista.

La metodología cualitativa es abordada desde un enfoque feminista. La información se obtuvo siendo obtenida mediante entrevistas en profundidad.

A modo de conclusiones, los movimientos sociales en Chile se han feministizado y son feministas desde su definición interna del quienes son y hacia dónde quieren ir. El movimientos estudiantil feminista es considerado una herramienta de politización política, la que a pesar de los vaivenes electorales del los últimos 5 años, ha provocado una expansión de una sensibilidad feminista que ha permeado a la cultura chilena.