Una de las promesas incumplidas de muchos de los procesos participativos que se desarrollan desde las administraciones públicas es su limitado impacto en las políticas públicas. 

El paper tiene una tesis principal: la mayor parte de estos procesos son diseñados por expertos en democracia, que se preocupan prioritariamente por perfeccionarlos desde ese punto de vista. Pero esa vocación democratizadora entra a menudo en conflicto con su capacidad de impacto en las políticas públicas, que no ocupa un lugar suficientemente prioritario en su diseño y encaje entre las dinámicas participativas y las del policy-making.

El paper utiliza materiales empíricos de diferentes proyectos de investigación sobre procesos participativos (desde Consejos consultivos hasta asambleas ciudadanas por el clima) y se deriva de una colaboración con el JRC de la Unión Europea para tratar de comprender y mejorar el impacto de los procesos participativos.