El caso de China y Turquía como ejemplos de Estado no Árticos sirve para ilustrar la realidad de Estados que se declaran árticos, en referencia a la competición entre Estados por posicionarse en el Polo Norte. Estas naciones han desarrollado una serie de conceptos como la verticalidad ártica o han reforzado sus lazos con países ribereños para legitimar su interés en una región de gran importancia geopolítica. China y Turquía, como casos paradigmáticos de dos Estados, el primero con carácter global y Turquía con vocación de serlo, enfocan desde diferentes perspectivas su proyección hacia el Ártico. Plantean su posicionamiento en esta región, alrededor de factores comunes y particulares, pero adecuados a sus políticas y estrategias de expansión.

En esta ponencia, partiendo de los planes estratégicos publicados por ambos países y de una amplia bibliografía, se analiza, con intención comparativa, los casos de China y Turquía. Se trata de discernir qué aspectos comunes y divergentes afectan a su proyección en la región, tales como su posicionamiento en la hegemonía global; su expansión comercial y económica; o las alianzas coyunturales con terceros estados que reducen la lejanía geográfica.