¿Un caso de «democracia representativa directa»? El Movimiento Cinco Estrellas entre el mito de la inmediatez y el desafío de persistencia en las instituciones

Autor principal:
Natascia Mattucci (University of Macerata)
Programa:
Sesión 1
Día: jueves, 19 de septiembre de 2013
Hora: 09:00 a 11:30
Lugar: E11SEM03

El comienzo de la crisis financiera que sigue afectando a Europa coincidió con la aparición en la escena pública italiana de un movimiento anti-sistema que desde el territorio llegó a las instituciones nacionales ganando el 25% de los votos. A diferencia de otros movimientos de protesta que florecieron durante el mismo período en el ámbito europeo y mundial y que se quedaron, sin embargo, en el canal de denuncia de la lógica antiegualitaria y patrimonialista del sistema, el Movimiento Cinco Estrellas ha optado por traducir la protesta organizada en la experiencia básica de la sociedad civil dentro de las instituciones participando en las elecciones. Dejando en segundo plano las referencias a menudo retóricas y simplistas a la antipolítica, se intenta analizar la metamorfosis o «muda» institucional adoptada por un movimiento de oposición desde la doble perspectiva de la comunicación política y de la crisis de la representación tradicional. Con respecto a los flujos de comunicación y a la opinión pública, algunos observadores han señalado que la torsión impartida por Cinco Estrellas a la escena mediática parece una revolución copernicana de la comunicación política italiana. El uso de las innovaciones tecnológicas, la web en general, parece representar la condición de posibilidad técnica de una comunicación directa entre la espontaneidad y el “hágalo usted mismo”, ya no mediada por los canales tradicionales de información. Estos últimos, sin embargo, representan un apoyo indirecto en esta dirección horizontal adoptada por la comunicación política aumentando así su eficacia: de hecho se prestan a un efecto inevitable de rebote y propagación de los mensajes de Cinco Estrellas. Con respecto al cambio que el movimiento quiere imprimir a la representación política como institución, por lo menos en el nivel material de práctica, la crítica a la tradicional función de filtro, selección y de mediación desarrollada por los partidos parece inaugurar aquél que ha sido definida autorizadamente, por un oxímoron, una «democracia representativa directa». Se trataría de una forma de democracia que viste los paños de la delegación, mantiene un vestido representativo pero asume como cuerpo magmático, difícil de componer, la presencia inmediata de los ciudadanos por la Web. Los ciudadanos-representantes tienen que mantener un contacto directo con los ciudadanos-representados. La inversión de la perspectiva de la comunicación en forma de «autarquía representativa» es básicamente la intención funcional, no sin contradicciones y ambigüedades, para quebrar la mediación representativa de los partidos tradicionales – considerados como formas esclerosadas y osificadas de disociación entre política y social – cruzándola de un lado a otro con la inmediatez que ofrece un uso generalizado de los flujos de comunicación a través de la web. De la tentativa de poner de parte las intermediaciones, comunicativas y políticas, abriendo a una presencia inmediata del pueblo, cuyo umbral inclusivo parece sin embargo señalado por el acceso al web, quizás elitista al menos en sentido generacional, mana la opción por un ejercicio no profesional de la política. Si por una parte esta política participada en forma de bricolage parece referirse a experiencias y a teorías que desde hace tiempo apuntan el dedo contra el déficit de representatividad del establishment partítico, por la otra el intento de vaciar la libertad del mandato sobre el plan de la práctica, vinculándolo a la inmediatez de una presunta voluntad general de la Web o de los fundadores del movimiento, abre la vía a posibles degeneraciones y puede empañar la pluralidad y libertad de las opiniones que connotan el espíritu democrático.

Palabras clave: Movimiento Cinco Estrellas, Comunicación política, Democracia representativa directa, Participación